¡DE LA MOVILIZACIÓN CALLEJERA AL GIMNASIO, Y DEL GIMNASIO OTRA VEZ A MOVILIZARSE, MUJER! (BIEN BINARIO: ¡Gobierno popular o vacaciones musculosas!). Escribe AMILCAR MORETTI

 

Escribe
AMILCAR MORETTI

             ¿Las feministas blancas clase media van a votar peronismo el 14? ¿Las blancas (de los feminismos argentinos, pañuelo verde y leyenda pro-aborto) han sido, son o siguen fieles del Frente de Todos? Ya dije que se puede ser gorila y feminista? (1) Algo de eso sabe Rita Segato, tan criticada cuando sugirió en noviembre del 2019 que el derrocado presidente de Bolivia Evo Morales «cayó por su propio peso», de algún modo porque no sabría interpretar el reclamo femenino. La voz Segato -dijeron desde el movimiento de mujeres de los territorios ancestrales en Bolivia- “tiene eco en el feminismo (¿blanco?) en el cual no nos reconocemos, por lo cual manifestamos nuestro profundo desacuerdo con la posición que Ud. (Segato) ha tomado respecto a la restauración neoliberal golpista en Bolivia” (2) y puntualizaron en que “su voz (la de Segato) no es cualquier voz. Plantea la vanguardia en la discusión en los círculos intelectuales y feministas en Argentina…»  Académicas feministas blancas argentinas de clase media, algunas integrantes del gobierno peronista, retrocedieron al silencio.

 

(de Publico)

             Pañuelos verdes en cumpleaños de quince de chicas de la pequeña burguesía porteña (como se vio en el 2018) no son feminismo. Es consumismo y seguimiento de modas industriales venidas del norte, colonialismo de la cultura industrial, feminismo «pilgrim» (puritano) del cual también ha hablado Rita Segato. ¿Esos pañuelitos verdes de adolescentes de entonces votan peronismo en la ciudad de Buenos Aires, donde desde el 2007 gana con holgura la derecha con simple -pero desapercibido y eficaz- marqueteo, lo que muestra el nivel y modo de politización de padres e hijas?

 

            «Somos el movimiento masivo más grande de la Argentina», me enrostró una abogada blanca de clase media urbana, peronista y feminista. Se refería a lo segundo: el feminismo. Habían sucedido las grandes movilizaciones de mujeres en Buenos Aires pro-aborto. Al parecer no vio nunca lo que aún puede hacer la central cegetista de los/las obreros organizados cuando se deciden a salir a la calle con bronca y por necesidad de morfar. No necesitan hablar con palabras forzadas a terminar con la vocal «e». Directamente, la accionan pero dentro de un contexto mucho más amplio de protesta y lucha y defensa de derechos sociales.

              Peronismo, aún manejado por «machos», es feminismo, da espacio a los feminismos. Feminismo no es peronismo. Hay un orden de prioridades alterado desde la academia :universitaria. Ya pasó, pudo advertirse a finales de los años 60 y principios de los 70 cuando «vieron» la revolución socialista a la vuelta de la esquina, y forzaron la locomotora hasta chocarla (¿con deliberación o pura voluntad enceguecida y narcisista?) y lograr 30 mil desaparecidos y un aterrador retroceso civilizatorio nacional. Hay que considerar una resolución similar en las actuales circunstancias, más delicadas de lo que algunas perciben. Para nuestra desgracia, se trata de binarismo puro. 

 

(de DW.com)

 

            Los grandes cambios pueden venir de arriba (Perón 1945) pero cuando las condiciones de abajo están dadas de modo absolutamente reconocible y hay un gran estratega que unifica el mando? Donde hay una necesidad hay un derecho (Evita). Eso es más preciso que la certeza de que lo «privado es político» (Carol Hanisch-¿Gloria Steinem?, ambas de Estados Unidos, años 60-70). Si hay conciencia, reflexión y lucha contra las injusticias sociales eso significa, aquí, peronismo, que incluye a feminismos. En Argentina -y en el mundo- no hay izquierda. No existe la izquierda, y en muchos lugares del planeta ni siquiera existe el proletariado-clase obrera. El Capital -o lo que sea que sea, con sus nuevas formas vía cuarta o quinta revolución tecnológica- SÍ existe. Tiene ahora características neofeudales y hace que los ricos (no la burguesía) sean cada vez más ricos. El sueño del pobre o de quien cree que aún puede ser un «tycoon» (ver películas «El aviador» y «El lobo de Wall Street» de Scorsese, «Petróleo sangriento» de Anderson o la original «El último magnate» de Elía Kazan sobre el último gran novelista social: Sinclair Lewis (no cuento a mi querido Steinbeck).

 

                   El solo acto de preguntarse si los feminismos van a votar peronismo en noviembre ya delata una gran duda que es fisura. ¿Dónde están las grandes movilizaciones autoorganizadas de mujeres para defender al actual gobierno del Frente de Todos, casi arrinconado? ¿Dónde para defender al hospital público -para que las «negras» y pobres hagan sus abortos gratuitos y legales- y más que nada para que haya salud accesible para todos? ¿Dónde están los feminismos masivos en la calle para defender el salario y denunciar la cadena intencionada y golpista de la inflación a punto de desbarrancar? ¿No recuerdan el final de Alfonsín y la década que vino después? ¿No recuerdan la disolución de las asambleas populares «que se vayan todos» post diciembre 2001?  ¿O realmente no les interesa, de modo suicida o intencionado, que gane o pierda el Frente? Las negras del sur de Buenos Aires ciudad van poco a los gimnasios blancos pre-vacaciones de verano; están absorbidas y absortas en la búsqueda  de comida para el día, el mango cotidiano.

           
Ojo, que algunas ideas y valores no son ideas ni valores, no son convicciones ni principios, son simple y a veces trágicas modas industriales planetarias venidas del centro.
Los entusiasmos de moda pasan, son fenómenos históricos contingentes. Cuando algo sigue en vigencia durante casi cien años es que se trata de un asunto de mucha profundidad, un fenómeno que, de modo no fácil de explicar, ha interpretado y representa un núcleo, en gran parte inconsciente, de nuestra cultura y su pueblo. Y ese núcleo duro del sentir social es el único que puede enfrentar y afrontar a los renovados fascismos que vestidos de neoliberales son «capitalismo» neofeudal de ricos y minorías, muy ricas y muy minoritarias, así como «muy» impiadosas y «muy» implacables. Los feminismos blancos de pequeña burguesía blanca debieran salir de los gimnasios y ocupar la calle para reclamar por lo central, que es imprescindible, más que lo importante.

 

(1) https://www.moretticulturaeros.com.ar/evita-peron-feminismo-hoy-argentina-escribe-amilcar-moretti/

(2) https://radiografica.org.ar/2019/11/22/mujeres-indigenas-responden-a-rita-segato/

(de Realpolitik)

Autor: Amilcar Moretti

AMILCAR MORETTI: Escritor, periodista y fotógrafo Sitio web central: ERÓTICA DE LA CULTURA www.moretticulturaeros.com.ar Desde el 2010. Buenos Aires. Mi mail: amilcarmoretti@hotmail.com Escritor de periodismo y fotógrafo de desnudo femenino en situación cotidiana.Crítico de cultura, cine, arte y sociología de lo cotidiano durante cuatro décadas en el diario EL DIA (www.eldia.com) de la Argentina. Creador en el 2010, autor y titular del sitio ERÓTICA DE LA CULTURA magacine de cultura, erótica y política. Blog complementario: htpps://amilcarmoretti.wordpress.com AMILCAR MORETTI Writer, journalist and photographer Central website: EROTICA OF CULTURE www.moretticulturaeros.com.ar Since 2010. Buenos Aires. Mail: amilcarmoretti@hotmail.com Journalism writer. Female nude photographer in an everyday situation. Critic of culture, cinema, art and sociology of the everyday for four decades in the newspaper EL DIA (www.eldia.com) of Argentina. Creator in 2010, author and owner of the site ERÓTICA DE LA CULTURA magazine of culture, erotic and politics. Complementary blog: htpps://amilcarmoretti.wordpress.com

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