Escribe
AMILCAR MORETTI
El filme parece anunciado como una continuación del “nuevo humor” o «nueva comedia» del cine estadounidense, que en verdad tiene ya veinte años o más. Pero “No mires arriba” es mucho más que eso. Puede ser cómica si se convive con lo sardónico y cruel, cómica pero realista, veraz en todos sus guiños y “chistes” (y, como se sabe «no hay chistes»). Toda la cultura estadounidense se pone en ridículo, desde la Casa Blanca y sus ocupantes hasta el mundo de los científicos, los militares, las corporaciones de nuevas tecnologías y, también, los ciudadanos comunes, jóvenes, maduros, ancianos, pobres, pequeños burgueses y clase alta. En ese sentido la veo más como una sátira muy seria, grave que, a decir verdad, me trajo a la mente “Melancolía” del danés Lars von Trier, por lo general muy oscuro, sobre todo si hablamos del fin de mundo. No es la contaminación, el virus o las hambrunas; es simplemente un meteorito que se estrellará contra la tierra y como nadie, de arriba o abajo, cree en ello, se dedican a ver pavadas en la televisión y pensar cómo engañar al otro con verso. Meta verso. En cierto sentido, es un filme que cabe a muchos países inundados por la cultura mediática. El trabajo de Cate Blanchett como una conductora de televisión en la especie de Susana Giménez y Juana Viale es realmente impactante en su desfachatez. Creo que también hay sorna crítica para con el feminismo. Leonardo DiCaprio no para de demostrar, como dije desde el principio de su carrera (cuando no sabía actuar), que se ha convertido en un actor importante, cada vez más completo y mejor en personajes serios y graves. Scorsese lo hizo crecer al máximo. Meryl Streep como presidenta de Estados Unidos puede verse como una combinación de Trump y Hillary Clinton, pero sexy. Jennifer Lawrence demuestra que sabe como cumplir bien un personaje de jovencita estudiosa y algo puritana. El final de la película es como “Melancolía”, sin ser necesariamente oscura dado que hay una recuperación fugaz de la familia que se une y acopla a otros detartalados del sistema. También estaría representado, por ponerle un nombre, el empresario Bill Gates, que en la ficción cree que es un mesías con cohete propio al futuro. Y así le va con corte de Noé. Sobrevive, quizás, el hijo estúpido de la presidenta (el siempre efectivo «gordito» Jonah Hill), entre los escombros, solo y diciendo “Mamá, mamá, dónde estás”. Hay algo de «Dr.Insólito» (Dr, Stragerlove») de Stanlery Kubrick y también de «Armaggedon» con Bruce Willis, más «Impacto profundo» de Eastwood. Pero aquí todo explota, o ya explotó. Película para ver en serio, mientras se tenga el coraje de decirse estúpido a uno mismo.
24-08-2021 Don’t Look Up, la película de Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence ha sido estrenada en Netflix.
Netflix lanzó Don’t Look Up, cinta dirigida por Adam McKay. El filme, protagonizado por Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence, se ve en la plataforma de streaming.
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Amilcar Moretti 