Tras la peste del SARS-CoV-2 quedarán instaladas las condiciones y circunstancias para un reordenamiento planetario con las características nacionales, regionales y continentales que pueda lograr cada espacio. La transformación quedará sentada en sus bases y, tanto si se prolonga mucho la pandemia como si concluye abruptamente, habrá disputas. Los cambios estarán ya en cada uno de los humanos, y se harán evidentes al reiniciarse la interrelación con los otros, semejantes o a-semejantes ya, y también se harán notorios en la intrarrelación de cada sujeto consigo que se verá marcada por la reacción y proceso propio del otro con que se interrelacione. Desde allí puede imaginarse que no solo el presente se sentirá distinto, y lo será en diverso grado, sino que el pasado también adosará ese cambio. Se lo percibirá y narrará de otro modo, desde otra mirada, quizás extrañada. Lo hecho quedará como una audacia o una ingenuidad. Para muchos que recién comienzan es probable que el futuro sea casi todo, pero para los que van por el medio o en etapas avanzadas la nostalgia se abrazará con una mirada descubridora y de revelación, que nos alentará o nos devorará. Cada uno reconstruirá la narrativa de sus propios recuerdos, y de los comunes. Habrá confusión, ojalá admiración, me temo que dolor.
AMILCAR MORETTI
Mayo 2020

Modelo: Cata
