DE LA TEVÉ, LO MEJOR: EL OJO QUE NOS VIGILA. Cinecanal, hoy domingo a las 22.

 

 

 

 

«ACTIVIDAD PARANORMAL»: LO

COTIDIANO DEL CONTROL SOBRE

NUESTRA INTIMIDAD.

 

 

Escribe
AMILCAR MORETTI
Argentina
(texto de la nota publicada hoy en la sección Espectáculos del diario El Día, de la ciudad de La Plata)

http://www.eldia.com.ar/edis/20111106/el-ojo-no-vigila-espectaculos5.htm

 

 

 

           Esta noche a las 22,15 en la televisión de cable va la primera entrega de “Actividad paranormal”, cuyo tercer capítulo está en estos días en las salas comerciales con notable éxito -en crecimiento- de público, tanto que se anuncia la planificación de una cuarta parte. Como se sabe, este pequeño filme de bajo costo del 2007, después un suceso progresivo, trata sobre una pareja con un bebé que comienza a sentirse espiada por alguien o algo extraño y desconocido durante las noches, sobre todo en el transcurso del acto de dormir. Una especie de “Gran Hermano” cuando los participantes de este ciclo “reality show” se acomodan en sus camas dispuestos a entregarse al sueño, o no, según alguna que otra escapatoria amoroso-sexual, entre actuada y real (sin límites precisos).

 

 

 

           Es como un registro ficcional de vida imaginaria filmada-registrada por una cámara que sigue nuestros movimientos pero no puede precisarse dónde está y qué hará con dicha grabación acerca de nuestras intimidades. Paranoia con causa fáctica o no, se parece bastante a lo reconocido en público días atrás por la comunidad de inteligencia de Estados Unidos, la más grande del planeta, en torno a que por intermedio de internet Explorer y Facebook y otras redes sociales, puede ubicarse no sólo a un individuo sino también conocerse los detalles más íntimos y privados de cualquier persona en el mundo. Basta ver el historial, grabado en una supercomputadora ubicadaza en una especial base militar de inteligencia, o apenas revisar las grabaciones encriptadas que siempre quedan en una PC hogareña común, aunque hayan sido barrados los archivos y búsquedas.

 

           Por lo general, una película de Hollywood –en los momentos en que se entrega, como sucede en los últimos años, a ampulosidades visuales para engañar los sentidos- suele costar varios cientos de millones de dólares y, si se suma la publicidad, largamente supera los mil millones. Una producción promedio, decente y suficiente en inversión, con estupendos director y guionistas y actores intensos se filma bien con entre 5 o 6 millones hasta 10 o 12 millones de dólares. Pero hay películas, como esta “Actividad paranormal” de hoy en Cinecanal, que en video portátil de alta definición pueden hacerse con 10 mil, 15 o 20 mil dólares que reúnen sus propios –jóvenes- autores o que les facilitan como un juego sus padres.

 

 

          Si el producto después es de calidad o contiene novedades con estas características de fábrica es algo que está verse y que en todo caso nunca queda asegurado. El cine, cumplidas mínimas necesidades, no depende del dispendio de grandes cantidades de dinero, aunque con ellas puedan cumplirse obras memorables. Claro que este es un asunto que no interesa de modo prioritario a la comunidad de cine estadounidense, amateur y menos profesional, donde la “utopía” es Hollywood. Hollywood: dinero, fama y el mayor desarrollo tecnológico. Vale de cualquier modo aclarar que en materia de digitalizaciones y perfeccionamiento de imágenes la vanguardia está en Hong Kong, con estudios o agencias pequeñas que, al cambio, demandan mucho menos dinero que en Hollywood. Sin inversión en equipos y en formación de profesionales (otro costo altísimo) se pueden concretar trucos, coloraciones y ediciones de máxima precisión.

 

 

          El cine en USA es una industria vinculada con otras actividades que fabrican dinero, como bancos, empresas de merchandising, televisión, discográficas y emprendimientos que nada o poco tienen que ver con el llamado “show business” (negocio del espectáculo, mostración para afuera). No es tanto la cualidad estética como la taquilla lo que interesa en Hollywood, aunque la primera nunca viene mal y hasta puede ser un estímulo para recaudar más dinero.

 

 

 

                

 

 

 

              Esta inicial “Actividad paranormal”, que repite con más rutina los recursos narrativos de “La bruja Blair”, recaudó unos 80 mil dólares más o menos, cinco veces lo que había costado a los chicos que la gestionaron. Se cuenta que la primera parte de “Actividad paranormal” se grabó con una cámara de video, entre amigos y en una casa, durante una semana. Al principio, pasó desapercibida para el públioco, pero después la compró DreamWorks con el propósito de hacer otra versión, más grande y con actores conocidos. Pero Steven Spielberg, vinculado a Dream se abrió y la franquicia quedó para Paramount, que comenzó a distribuirla en otros pocos países, como prueba en terreno.

 

 

Una opinión es que el atractivo de esta serie de películas está en la informalidad, antes llamada inexperiencia. Es probable, ya que la estructura cerrada de las superprofesionales y cuidadas películas de Hollywood, en su nivel aceptable, no suele ofrecer grietas ni intersticios pero tampoco grandes novedades que estimulen a las nuevas audiencias. En “Actividad paranormal” el espectador, al igual que los habitantes de la casa “poseída” del filme, “viven” hechos en lo que no disciernen lo real de lo imaginado. No  saben “quién” o “qué” los espía. El filme introduce, primero, miedo; después en sucesión o simultáneo, extrañeza; sospecha mutua entre los convivientes; temores a lo alucinatorio (fantasía de “volverse loco”).

 

 

           Además, el malestar al percibir o imaginar un control desde alguna fuerza o exterioridad desconocidas; vigilancia de la intimidad con su previsible incomodidad; intrusión y despojamiento; invasión e inseguridad (reducir la sensación de lo propio e inviolable, lo privado y secreto), y una serie de sentimientos, ideas y emociones bastante comunes y cada vez más generalizados en el mundo planetarizado por internet y los servicios de vigilancia computacional. Allí, se suma la paranoia, casi un instrumento y arma, a mi entender  usados con cuidada programación, que inoculan miedo hasta al más desprevenido, que bien “viven en Babia” o bien sienten insoportable el exceso de realidad en “libertad” vigilada.

Hoy, a las 22,15 por Cinecanal.

 

 

 

Autor: Amilcar Moretti

AMILCAR MORETTI: Escritor, periodista y fotógrafo Sitio web central: ERÓTICA DE LA CULTURA www.moretticulturaeros.com.ar Desde el 2010. Buenos Aires. Mi mail: amilcarmoretti@hotmail.com Escritor de periodismo y fotógrafo de desnudo femenino en situación cotidiana.Crítico de cultura, cine, arte y sociología de lo cotidiano durante cuatro décadas en el diario EL DIA (www.eldia.com) de la Argentina. Creador en el 2010, autor y titular del sitio ERÓTICA DE LA CULTURA magacine de cultura, erótica y política. Blog complementario: htpps://amilcarmoretti.wordpress.com AMILCAR MORETTI Writer, journalist and photographer Central website: EROTICA OF CULTURE www.moretticulturaeros.com.ar Since 2010. Buenos Aires. Mail: amilcarmoretti@hotmail.com Journalism writer. Female nude photographer in an everyday situation. Critic of culture, cinema, art and sociology of the everyday for four decades in the newspaper EL DIA (www.eldia.com) of Argentina. Creator in 2010, author and owner of the site ERÓTICA DE LA CULTURA magazine of culture, erotic and politics. Complementary blog: htpps://amilcarmoretti.wordpress.com

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s